sábado, 30 de noviembre de 2013

MI PRIMERA RUTA CON LOS MIR

SABADO 23/11/2013
CRONISTA: AZAHARA
 
Me he despertado con una energía brutal, y con la emoción de que sería mi primera ruta, una ruta supuestamente "fácil" jaja que para mí no lo ha sido, pero eso supongo que debido a mi inexperiencia.

Punto de encuentro en decathlon, que al ver a tanto mozo, no sabía si seguir xD, nos hemos dirigido hacia el Coll de Sa Creu, mientras subía la montaña pensaba no sé si aguantare, y eso que era el principio, cuando hemos llegado arriba, y hemos hecho la bajada, entonces me he dado cuenta de que existen los ángeles, porque no he muerto de puro milagro, la ostia podía haber sido guapa jaja, cuando he llegado abajo ha sido una mezcla de puro miedo, pero una descarga de adrenalina de dios, quiero más.

Después ha habido más bajada, pero yo ya ahí con mis patitas,
nos hemos ido hacia el Burotell y por ahí ha estado bien, fácil
divertido.. Hasta que yendo hacia Galilea, creía que me había perdido, si no llega a ser por adri que cuando lo he visto, he visto la luz, y después había un par más que me tenéis que perdonar pero no me acuerdo de todos los nombres, subiendo, ha llegado un punto en el que no podía más, gracias a rayo también por su ayuda prestada.

Al llegar a Galilea, me quería morir jaja cuando he tenido que subir esas cuestas ya sí que no podía más, gracias a los chicos por animarme y ayudarme porque me veía de vuelta ya.. Al bajar de la carretera de Galilea a Puig Punyent, el pobre Emilio, se ha caído, por desgracia para muchos no ha dado tiempo a grabarlo, jaja si esque.. Bueno que decir después de su ostia, he meditado bien y he decidido bajar a pie porque si no la próxima era yo..

Y ya el camino de vuelta, ha sido fácil, lo que debido a mi cansancio, ya veía una cuesta y uff me ha costado..

Solo me he caído dos veces para mí es un record, esperaba más caídas..

Pero aparte de toda está ruta, lo mejor ha sido la compañía, los compañeros que han sabido motivar en el momento preciso y el buen rollo que hay. Si quiero repetir, aunque me haya costado lo mío. Por momentos en según que tramo pensaba estos tíos están locos jaja pero la verdad es que me ha encantado..

Así que gracias por haberme dado la oportunidad de participar y espero volver, pronto.. Y muchas gracias a todo por el calor recibido, (no mal penséis!!!). :D:D
Y gracias sobre todo a Adrián y a Manuel casas jimenez. Por tener paciencia y estar a mi lado en todo momento!!
 

domingo, 17 de noviembre de 2013

ALREDEDORES DE PALMA (ll)

SABADO 16/11/2013
CRONISTA: RAMON
 
Dos circunstancias en la ruta de hoy, habían levantado la expectación general, la primera, era la participación de Azahara, la nueva chica de los MIR, la segunda era la promesa de Luque de hacer el famoso salto del DH de Sa Creu. Las previsiones de asistencia, ya se habían disparado, desde el primer momento de la publicación del evento. Hasta Martin Sastre ha aparecido hoy. El tiempo, mejor dicho, el mal tiempo, ha frustrado ambas. Toda la semana, se habían anunciado lluvias importantes para todo el día, y Azahara no ha querido arriesgarse a coger un resfriado. El salto de Luque, también se ha tenido que suspender, por lo impracticable del terreno. Esperemos que, ambas circunstancias, se lleven a cabo en breve.
Hemos empezado con problemas mecánicos en la rueda trasera de Elías, que junto a Toni, se han reincorporado al periodo invernal de rutas, que a la postre le han hecho abandonar justo en mitad de la ruta. Por cierto Elías, arregla la rueda esta semana, no esperes al próximo sábado. En las primeras zonas de tierra, que hemos tocado, Julián ha tenido un aterrizaje forzoso, aunque sin ningún resultado negativo para él, ni su bici. Mientras esperábamos que se reincorporase, es Toni, el que de parado se ha caído de improviso, se había mareado.El hombre esta acostumbrado a los aires de los Pirineos. Unos minutos de reposo, y a seguir. El hecho de empezar la ruta 13 bikers, ya me había dado un mal presagio. Hemos continuado hacia el Castillo de Bellver, el reino de Rayó, donde se mueve como pez en el agua, para enlazar con la Bonanova. El terreno estaba muy húmedo y resbaladizo, teniendo que extremar las precauciones cuando pisábamos piedras lisas.
De la Bonanova, hemos ido a Genova por carretera. Aquí, nos dejan Pina, que tenia que trabajar por la tarde, (porque se habrá tomado la molestia de venir, solo por un par de horas?) y Adrián, que se había quedado sin freno trasero.
Pasado Genova, es Emilio, quien desllanta su rueda trasera con una piedra. Un par de bombonas de co2 y se soluciona el tema. Reemprendemos la marcha por un sendero muy entretenido, que nos llevara a Illetas, después de bajar casi 100 metros de escaleras.
Se trataba de llegar a Palma Nova, tocando los menos metros posibles de asfalto. Nuevo sendero en la Zona de Bendinat, yo como sherpa de la ruta, iba el primero, al llegar a unas escaleras de madera, y sin pensar si resbalarían, o no, me he tirado exactamente igual, que lo hubiese hecho, en un día seco. Pero las consecuencias han sido muy distintas. La hostia que me he dado ha sido espantosa. Me he quedado sin respiración, medio aturdido durante un buen rato. El golpe en mi muslo, costado y hombro derechos, ha sido antológico. Incluso a pie patinaba, como si estuviesen enjabonados los dichosos escalones. Soler bien lo sabe, que al irme a socorrer, también se ha pegado una buena toña. Este hecho, ha marcado el resto de la ruta para mí. Así como he podido he llegado a Palma Nova, donde, por cierto nos ha caído la única y ligera llovizna encima. El leitmotiv de la ruta de hoy, era enseñarle a Javi, donde se había equivocado, la última vez que vino por estos lares, al no poder llegar a la pista de Na Burguesa desde la cantera. Ya que había llegado hasta aquí, intentaría guiarles un par de kilómetros más, y me volvería hacia Palma Nova, donde mi mujer me podría recoger.
Al atravesar una zona de arcilla muy mojada, nos hemos enfangado de lo lindo, tanto nosotros mismos, como a nuestras monturas.
En el inicio de la pista, he titubeado, entre seguir, volver a Palma Nova, o llegar a Palma por el carril bici. A pesar de las proposiciones deshonestas, que me ha hecho Sito, que por fin, esta semana recibió su rueda desaparecida, en el sentido de esta última opción, he decidido seguir, aunque a un ritmo muy lento. Realmente solo podía hacer fuerza con la pierna izquierda. Me ha costado una barbaridad subir hasta arriba, así como atravesar toda la sierra, hasta el Coll des Pastors. He propuesto bajar por el monumento, para disminuir un poco el tiempo de sufrimiento. En este punto ya habíamos acordado, no bajar el DH, privando a Luque de la posibilidad de quedarse con todos nosotros en el famoso salto.
Antes de llegar a casa, una parada por las maquinas a presión de Son Rapinya, puesto que nuestras monturas, no estaban como para poder entrar en casa, eran un autentico amasijo de barro. Imaginaros esta ruta, sin caídas, con buen tiempo, sin roturas, con Azahara, el Luque saltando, bueno viene a ser igual que lo del póker, y ganando. Eso tiene que ser la hostia. Gracias amigos. ¿Alguien tiene un par de muletas?.
 

PASEO POR ESPORLAS

SABADO 09/11/2013
CRONISTA: RAMON
 
Hoy, tengo malas noticias para los neófitos del deporte de la bicicleta, dando por descontado, que alguno lea estas crónicas, claro.
Cuando practicamos este deporte por primera vez, lo primero que pensamos es, “que duro es esto”. Inmediatamente después el siguiente razonamiento es este, “pero contra más entrene, menos voy a sufrir”.
Este segundo pensamiento, pudiera ser verdad, si nos quedáramos en un tipo de practica muy light, que no implique ir en grupo, ni ambición de superación, ni otros muchos alicientes.
La mala noticia en cuestión, es que nunca se deja de sufrir, a lo más que podemos llegar es a soportar este sufrimiento como una rutina, que incluso puede llegar a ser placentero. Conozco a mucha gente que no lo entiende así, ya que piensan que es puro masoquismo. En cambio, los que practicamos el mtb, y la bicicleta en general, conseguimos quitarnos la pereza de encima y salir a hacernos nuestras rutas, con sufrimiento incluido, porque sabemos que al regresar nos vamos a sentir bien. En cambio, si nos quedamos en casa, tirados en el sofá, nos invaden los remordimientos: “debería entrenar, estoy perdiendo el tiempo aquí, haciendo el vago”.
Y todo esto viene a cuento por la ruta de hoy, en la que realmente hemos sufrido de lo lindo, cuando esperábamos un placentero paseo por Esporles. Nos hemos reunido 9 bikers aunque al cabo de pocos kms. Sito ha tenido que abandonar por rotura de su maquina. Últimamente se pierde las mejores. El resto, Adrián, David Rayó, Emilio, Luke (al pobre le hemos pillado entre fuego cruzado, después de tres semanas en dique seco), Soler, Uti, Enrique y Ramón, hemos completado una ruta de las más clásicas que se pueden hacer en btt, por nuestra zona. Desde Palma, por Son Mayol, en dirección a Esporles, para subir por el Cami des Pescadors, Ran de Mar, La Bramson, Port des Canonge, Volta des General, Cami des Correu, Esporles, Palma.
En principio, la ruta esta bien, moderada. Unos 50 kms. con unos 1.100 de desnivel acumulado. No es excesivamente dura. El problema viene, cuando algún inconsciente plantea la salida a modo de entreno del v02max, pensando que los demás le van a dejar hacer el entreno a solas. Y todavía se agrava más el problema, cuando no hay un solo inconsciente sino varios, que se van relevando en la tarea de dinamitar al grupo.
Realmente hemos hecho un entreno durísimo, no ha habido subida, donde el inconsciente de turno, no haya actuado, incluso a sabiendas de su propio esmoche. Ha habido momentos en los que varios de nosotros teníamos un solo pensamiento en la cabeza “no quiero sufrir más, me voy a parar”, pero no lo hacíamos, continuábamos, ya fuese intentando no quedar atrás, o irnos por delante. Masoquistas, vamos.
Incluso cuando durante la ruta encontrábamos subidas imposibles, improvisábamos competiciones para intentar hacerlas, aunque lo único que hubiésemos podido puntuar, han sido las variadas caídas, sin importancia, pero muy aparentes.
Lo he hablado largamente con Emilio en la sobremesa. Nosotros venimos de Menorca, donde hemos hecho tres jornadas duras, que creíamos que nos servirían de bálsamo, al menos para no sufrir en la de hoy. Pero la realidad es, la que he explicado antes, al estar más fuerte, más exigencia, e igual a más sufrimiento. En definitiva, lo que entrenamos es el sufrimiento, a soportarlo un poco mejor, a convivir con él. Y a veces ni eso conseguimos.
Si hoy no hubieran venido Uti y Enrique, seguramente no nos hubiéramos machacado tanto. Lo tengo dicho, no les digáis ni la hora, ni donde quedamos, pero los cabrones se enteran, se escapan del geriátrico y vienen. (Es broma, claro).
Aunque a alguno más, también hay que echarle de comer aparte. No quiero dar nombres, pero el nivel sigue subiendo por momentos. Al pobre que, por fuerza mayor, no pueda salir alguna semana, la jauría de lobos, en la que se ha convertido este grupo, se lo comen crudo.
Por mi parte estoy buscando alternativas. ¿No habrá algún grupo, que me quiera acoger en su seno? Y si es femenino mejor. Por cierto comentar que en Menorca, encontramos un grupo formado por 10, si he dicho diez, chicas, y un solo chico. Igual que aquí, ¿verdad?.
Tengo la ¿vana? Esperanza, de que el esmoche de hoy, nos servirá de bálsamo, para no sufrir el próximo sábado. No lo creo, pero allí estaremos, dispuestos a sufrir y a no malgastar un día libre tirados en el sofá. Por cierto espero seamos muchos más que hoy. Igual vienen chicaaaass.
Gracias amigos.
 

miércoles, 6 de noviembre de 2013

CAMI DE CAVALLS 2013

  JUEVES 31 OCTUBRE A DOMINGO 3 DE NOVIEMBRE DE 2013
CRONISTA: RAMON
FOTOS
 
He añadido el año, al titulo de la crónica, porque simplemente espero que algún día, no muy lejano, pueda escribir alguna más, con el mismo titulo, pero con una cifra diferente.
Son varias las razones por las que este ha sido un gran viaje, muy satisfactorio y enriquecedor, en todos los sentidos, deportivo, humano, social, y personal.
Intentare dar unas pinceladas, para explicar brevemente, lo anteriormente afirmado.
Lo primero de todo es, que cuando uno se crea unas expectativas, y después resulta que la experiencia vivida supera con creces esas expectativas, la satisfacción es mucha y agradable. Mal empezamos desde un principio, a causa de la anulación del barco de las 16 horas del jueves 31/10, dándonos solo la opción de salir a las 8 del mismo día, o a la misma hora del viernes. Esta última opción nos restaba una jornada, a la ya de por si corta estancia. Se decidió partir el jueves a las 8 de la mañana. Desgraciadamente, esta opción dejo en tierra a Sito, que no pudo acoplarse al nuevo horario. Lo sentimos mucho, además de acordarnos de el durante todo el viaje.
La travesía en barco fue terrible, viajamos con mar gruesa, haciendo padecer a la mayoría de viajeros grandes mareos, apenas desde la salida del puerto de Alcudia. Fueron tres horas horribles de viaje en un barco, viejo, sucio, sin apenas servicios y con personal con mal carácter y poco profesional. Hasta fumaban en el interior de la bodega. Iscomar, es el nombre de esta gran compañía.

La llegada a Ciudadella, en un nuevo puerto, amplio y moderno, pero frío, sin la calidez del viejo y bonito en el centro de la ciudad. Los organizadores de nuestro viaje, Cami de Cavalls 360, nos estaban esperando, para darnos la bienvenida y recoger nuestros equipajes, para trasladarlos al hotel. Por cierto, hotel de dos estrellas, sin grandes pretensiones, pero que cubrió nuestras necesidades a la perfección. En los apenas dos kilómetros hasta el mismo, solo preguntamos tres veces, y así y todo, nos perdimos otras tantas. Empezábamos bien. Para los mal pensados, decir que no, que no fue culpa de Emilio a los mandos de su GPS, todavía no lo había puesto en marcha. Aprovechare este inciso, para decir que, están ya muy lejos los días en los que titubeaba en el manejo del aparato. Aquí nos dirigió con maestría absoluta, y gran profesionalidad. Los momentos de duda, los resolvió a los pocos metros, evitándonos esfuerzos inútiles. Y debo añadir que en ocasiones era harto difícil. Gracias una vez más, por si no me oíste cometerlo durante la ruta.
Paseíto por la ciudad, comida en una terraza, y ya por la tarde, briefing a cargo de Joan de Cavalls 360. Nos da cuatro explicaciones de lo que nos vamos a encontrar. Lo bueno de este sistema, es que ellos se encargan de recoger los equipajes, y llevarlos al siguiente hotel, además de apoyo en caso de necesidad.
Cena en un buen y bonito restaurante del centro, y a dormir prontito, que a la mañana siguiente nos teníamos que enfrentar a una ruta completamente desconocida para todos nosotros.
Las previsiones metereologicas, anunciaban lluvia y frío para estos tres días. A las siete de la mañana, el termómetro marcaba 10º, después del desayuno, yo aparecí vestido de invierno, camiseta térmica, maillot manga larga, chaqueta, y culotte largo. Los demás, no se si inconscientemente, venían mucho mas ligeros de ropa que yo.
Empezábamos, foto en el centro del Borne, y a pedalear se ha dicho. Ya desde la salida, lucia un sol esplendido. En poco tiempo tuvimos que parar a quitarnos ropa, sobre todo yo, el termómetro marcaba 23º. Y eso ha sido la constante metereologica de estos tres días, sol y temperatura casi veraniega.

La primera etapa consistía, saliendo de Ciutadella, en llegar a Cala en Porter, bordeando la costa por la parte sur, en dirección a Mahon.
Debo decir que, a pesar de que casi todos nosotros habíamos estado en Menorca, ninguno conocía la Menorca que se nos iba mostrando a cada pedalada. Ha sido ir de sorpresa en sorpresa, admirando unos paisajes preciosos, auténticos, sin urbanizaciones al lado del mar. Si una cala era bonita, la que le seguía, lo era más todavía. La ruta que hicimos, y eso vale para las tres etapas, es una autentica gozada para cualquier amante del mtb. Hay trialeras entretenidas, hay bajadas infernales, hay subidas explosivas. Es un disfrute a cada metro que se cicla. Nada parecido a la imagen que uno se hace al pensar en Menorca, llana, sin elevaciones importantes. Se puede pedalear durante horas, y horas sin tocar asfalto ninguno. Por las pocas urbanizaciones que pasamos, era como si estuvieran abandonadas, solitarias, todo cerrado, sin turistas, sin gente. La temporada acabo a finales de septiembre. Ahora tienen siete meses de descanso invernal. La vieja polémica Menorquina, o preservamos, o urbanizamos. Mi humilde consejo es que preserven. Aun con tan corta temporada turística su nivel de vida es superior al nuestro, y viven en una naturaleza autentica, si la destruyen cambiara todo, y creo que a peor.
No voy a explicar las minuciosidades de la ruta, es harto difícil, después de tres días por parajes desconocidos. Fueron 66 kms, con un desnivel de 1.100 metros, y unas 4 horas y media de pedaleo efectivo. Llegamos a Cala en Porter a las 16`30, donde nos estaba esperando Clara de Cavalls 360, para dejarnos, a nosotros, y a nuestras maquinas, en el hotel de Mahon, distante unos 15 kms.
Hotel de 4 estrellas, de buena calidad, con el añadido de un pequeño Spa, que nos vendría a las mil maravillas, aunque la ruta no había sido excesivamente dura. Cena en el mismo hotel, con buffet a módico precio, y buena calidad. Emilio y Pina, se atrevieron con un copazo de sobremesa para templar los nervios.
A las 9 de la mañana, nos recoge Clara, para dejarnos exactamente en el mismo punto de Cala en Porter, donde nos había recogido la tarde anterior. Antes de empezar, hay que arreglar una rueda vacía de Adrián.
En esta segunda etapa debíamos llegar a Ses Salines de Fornells. Era la más larga de las tres. Fueron 77 kms, con un desnivel de 1600 metros, 93 barreras, si Sergio se dedico, además de abrirlas diligentemente para todos los demás, a contarlas. Estuvimos la friolera de 6 horas y media pedaleando, la última de ellas de 6 a 7 de la noche, completamente a oscuras.
Buena parte de la culpa la tuvo la bicicleta de Alfonso, le paso de todo, rompió un radio, el cambio, el desviador, y a mitad de etapa, perdió todos los tornillos del disco de freno trasero, y por consiguiente el propio disco. Fue la segunda vez que vi. volar esa bici en dirección a las matas de la vera del camino. Pero por desesperación de Alfonso, la recuperamos y tuvo que seguir, eso si, sin freno trasero. Bajo cada cuesta en esas condiciones que daban escalofríos. Los tiene bien puestos.

Un poco más adelante es Pina, el que en un alarde de temeridad, baja unos escalones infernales. El resultado fue un huevo, y un ocho. Un huevo en la caña del hueso de la pierna del propio Pina, y un ocho en la rueda delantera de su bici.
Ya casi oscureciendo debemos poner una cámara a la rueda trasera de Adrián.
Todos estos inconvenientes nos harán perder un tiempo precioso, y que a la postre nos obligaran a usar un Movil como linterna para que seis esforzados bikers lleguen a su destino, sin ningún tipo de ayuda externa. Una vez en el hotel, dos bikers de Porto Cristo, muy amablemente nos dieron un juego de tornillos del disco
Aquí debo mencionar nuevamente el papel protagonista de Emilio, nuestro mecanico de confianza, que mientras los demás nos duchábamos, y el dueño del hotelito nos conminaba a ir a cenar, el dejo las bicis de Pina y de Alfonso, en perfecto estado de funcionamiento. Gracias nuevamente.
Cena de hidratos, y a dormir prontito. Hoy si que estábamos “esmochaos” de verdad.
Amanece un día esplendido, con sol radiante, ya desde las siete de la mañana.
El bote de crema para las partes menos nobles de nuestra anatonia, culo, para los de la logse, pasa de mano en mano, hasta casi agotar su contenido.
Un desayuno más bien espartano, e iniciamos la última etapa. Teníamos que llegar a Ciudadela, después de 60 kms, con un desnivel de 1.200 mts, y 4 horas y media de pedaleo efectivo.
No quiero hacerme pesado, pero debo dejar constancia nuevamente de la majestuosidad de la costa norte de Menorca, completamente diferente del sur, de una belleza salvaje, agreste, sublime. Había unas subidas espectaculares, seguidas de bajadas fantásticas a calas vírgenes. Senderos suspendidos en los acantilados. Cada momento que vivíamos en estos parajes, eran de enorme intensidad. Todos cual pelotón militar, juntos si el ancho lo permitía, en paso de a uno, si era angosto.
Una delicia ver a Adrián levitar, si he dicho levitar, subiendo cual pluma al viento porcentajes imposibles. Bien distinta la imagen de Emilio, y Pina, subiendo esas mismas dificultades, pero en este caso, por fuerza, y tesón, esforzándose al máximo, pero logrando el mismo resultado.
En el ámbito social, mencionar la enriquecedora experiencia de convivir durante unos días, gente mayor como yo, y los otros tres mayores, aunque no tanto, con chavales tan jóvenes como Sergio (16 años), Adrián (18 años),
En algún momento les dije que se aprovechasen de las experiencias de vida nuestras, que eso les iba a enriquecer, como a nosotros, su visión inocente y pura de las cosas.
Cuando piensas que con una diferencia de casi 40 años, estamos haciendo lo mismo, juntos y divirtiéndonos todos, es fantástico, y digno de reflexión.
Llegamos a Ciutadella, ducha en el primer hotel, hamburguesa en la plaza, y rumbo a puerto para atravesar el Canal de Menorca, hasta Alcudia, ahora mucho más tranquilo, haciendo la travesía casi agradable. Aquí nos encontramos con un grupo de bikers de Llombards, con los que habíamos coincidido en los inicios de la segunda etapa, pero en direcciones opuestas. Dio la casualidad de que yo había perdido mi cuenta kms., y ni Sergio ni yo, que volvimos unos cientos de metros atrás, lo encontramos. Les comunicamos el hecho a ellos por si lo encontraban. Nadie apostaba por ello, puesto que lo escarpado del terreno en esa zona te obliga a ir pendiente de otras cosas, y no de un minúsculo artefacto de apenas unos centímetros. Pero en el anden del puerto, estaban ellos con mi Sigma Rox, y un chantaje, “solo te lo doy, si algún día nos lleváis de ruta por vuestra zona”. Como podéis imaginar, mi alegría fue doble. Primero por recuperar el cuentakms. , y segundo por poder salir con Miquel y amigos cuando ellos quieran. Mil gracias nuevamente.

No quiero alargarme más, para que la lectura no se haga pesada. Solo quiero remarcar varias cosas.
Menorca es preciosa. El Cami de Cavalls es increíblemente bonito. La experiencia ha sido fantástica. El compañerismo ha reinado por sus fueros, como igual hubiera sido, con cualquier Iron. La gente del mtb, es noble y generosa.
Siento que hayáis tenido que aguantar a un viejo gruñón. Y a los que no habéis venido, por leer semejante tocho. Gracias a todos por ello.